La palabra fibromialgia (FM) significa dolor en los músculos y en el tejido fibroso (ligamentos y tendones).

La fibromialgia es una patología crónica consistente en una percepción anómala del dolor, de forma que se perciben como dolorosos, estímulos que no lo son.

Este dolor, que se localiza en zonas musculares, tendinosas, articulares y viscerales, puede presentarse como única alteración (fibromialgia primaria) o asociada a otras enfermedades (fibromialgia concomitante) y se percibe en los denominados “punto gatillo”:

Aunque no produce secuelas físicas (no destruye las articulaciones, no ocasiona lesiones irreversibles ni deformidades) ni influye en la supervivencia del paciente, el impacto que causa en su calidad de vida puede llegar a limitar sus actividades básicas e instrumentales de la vida diaria (ABVD y AIVD).

La fibromialgia cursa con síntomas como:

• Dolor y rigidez en todo el cuerpo
• Fatiga y cansancio
• Niebla mental (problemas con el pensamiento, memoria y concentración).
• Depresión y ansiedad
• Migrañas
• Síndrome del intestino irritable
• Adormecimiento u hormigueo en manos y pies
• Dolor en el rostro o mandíbula, incluyendo una afección conocida como trastorno de la articulación temporomandibular
• Problemas para dormir

 Es una enfermedad frecuente, la padece entre el 2% al 6% de la población, sobre todo mujeres. Puede presentarse como única alteración (fibromialgia primaria) o asociada a otras enfermedades (fibromialgia concomitante).

Los tratamientos de los que se disponen en la actualidad están orientados a paliar el dolor, por eso en Apafima proponemos un programa integral y holístico en el que el ejercicio físico adaptado a la particularidad de estos pacientes, constituye una parte fundamental del mismo, junto a la atención psicosocial y a la oferta de actividades lúdico-terapéuticas.